La pandemia de coronavirus (COVID-19) ha alterado la vida familiar en todo el mundo. Cierres de escuelas, trabajo remoto, distanciamiento físico: es mucho para todos, pero especialmente para los padres. Este conjunto de fichas presenta unas claves para abordar la situación.
Esta guía ofrece a familias y cuidadores un conjunto de consejos útiles para ayudar a manejar esta situación en las que las familias pueden verse sobrepasadas por distintos factores relacionados con la educación de sus hijos.
UNICEF se ha unido a la iniciativa Parenting for Lifelong Health, formada por varias organizaciones especializadas en le cuidado de la infancia, para poder ofrecer esta guía.
Cada situación aparece reflejada en una ficha PDF independiente. Cada ficha trata temas de parentalidad positiva y consejos para frentar situaciones difíciles: enfados, seguridad on-line, control del estrés, problemas de comportamiento, convivencia en casas pequeñas llenas de gente...
A CONTINUACIÓN SE EXPONEN 12 FICHAS CON UN TEMA ESPECÍFICO, FAVOR REALIZAR UN COMENTARIO PERSONAL DE SOLO UNA DE ELLAS (Adjunto encontrara un pdf si desea profundizar en el tema):
1. Hablando sobre la pandemia de COVID-19 Es necesario que hablemos con los niños y niñas, tengan la edad que tengan. Ya habrán escuchado muchas cosas y el silencio y los secretos no protegen a nuestros hijos: la honestidad y la disponibilidad a hablar sí. Adapta el mensaje a su capacidad de comprensión. DESCARGA ESTE PDF 2. Tiempo personal El cierre de las escuelas nos ha dado una oportunidad insospechada de fortalecer las relaciones con nuestros niños y adolescentes. El tiempo personal que dedicamos a cada uno de ellos, el tiempo "uno a uno" es gratis y divertido. Hace que los niños se sientan amados y seguros, y les muestra que son importantes. DESCARGA ESTE PDF 3. Mantener un ánimo positivo Es difícil sentirse positivo cuando nuestros hijos nos están volviendo locos. A menudo terminamos diciendo "¡Deja de hacer eso!". Pero es mucho más probable que hagan lo que les pedimos si les damos instrucciones positivas y felicitaciones por lo que hacen bien. DESCARGA ESTE PDF 4. La importancia de estructurar La COVID-19 nos ha quitado nuestras rutinas diarias de trabajo, hogar y escuela. Esto es difícil para todos y elaborar nuevas rutinas puede ayudar. DESCARGA ESTE PDF 5. Aprendiendo a través del juego Aprender a través del juego puede ser divertido para todas las edades. DESCARGA ESTE PDF 6. Seguridad en línea Los estudiantes ahora pasan mucho más tiempo en línea. Estar conectados les ayuda a reducir el impacto de la COVID-19, les permite seguir la rutina de clases y los alienta a continuar con sus vidas ... pero también presenta riesgos y peligros. DESCARGA ESTE PDF 7. Armonía familiar en casa Cuando construimos relaciones pacíficas y respetuosas, nuestros hijos se sienten más seguros y amados. El lenguaje positivo, la escucha activa y la empatía ayudan a mantener un ambiente familiar tranquilo y feliz durante estos tiempos estresantes. DESCARGA ESTE PDF 8. Mantener la calma y controlar el estrés. Este es un momento estresante. Cuídate para que puedas apoyar a tus hijos. DESCARGA ESTE PDF 9. Mal comportamiento Todos los niños se portan mal. Es normal cuando están cansados, tienen hambre, sienten miedo o están aprendiendo a fortalecer su autonomía. Y pueden volvernos locos cuando estamos atrapados en casa. DESCARGA ESTE PDF 10. Gestionar el enfado Amamos a nuestros niños y adolescentes, pero el estrés de COVID-19, el dinero y el encierro pueden hacer que perdamos los nervios. Así es como podemos mantener el control y controlar nuestra ira para no hacer daño a nuestra familia. DESCARGA ESTE PDF 11. Presupuestos familiares en tiempos de estrés financiero El estrés por el dinero en tiempos de la COVID-19 puede agotarnos, enfadarnos y distraernos y a veces nuestros hijos no entienden que hay que ajustarse a un presupuesto. Podemos hacer cosas que ayuden a lidiar con el estrés financiero. DESCARGA ESTE PDF 12. La educación en casas abarrotadas Mantener a la familia segura frente a la COVID-19 puede hacerse aún más difícil cuando vivimos en condiciones de hacinamiento. DESCARGA ESTE PDF
Tomado de: https://www.unicef.es/educa/biblioteca/educacion-familia-covid-19
Es sensato recapacitar sobre la necesidad de crear hábitos saludables, de estructurar una rutina diaria para los niños en edad escolar. De esta necesidad se ha hablado desde antes de los tiempos de la pandemia por el COVID-19.
Los educadores se han pronunciado sobre las ventajas del acompañamiento familiar en los procesos de aprendizaje, este acompañamiento es el que en ultimas va a proveer a los niños en edad escolar de las estructuras y lo hábitos saludables.
Flórez, G., Villalobos, J., Londoño-Vásquez, D. (2017) escribieron sobre el acompañamiento familiar en el proceso de formación escolar para el contexto colombiano, estos investigadores realizaron una revisión del acompañamiento de la familia al escolar y describen este acompañamiento como una necesidad que debe ser atendida ya que dicho acompañamiento tiene una connotación significativa en el desarrollo exitoso de los procesos escolares de los niños en edad escolar.
Estos autores en la introducción de su artículo señalan que la relación familia-escuela:
"juega un papel relevante porque cada momento histórico plantea retos y responsabilidades que deben ser solucionados a partir de la implementación de estrategias que nacen de la interacción hijo–familia y docentes–estudiantes con el ánimo de crear oportunidades que permitan relacionarse con los problemas de manera productiva, eficiente y efectiva para lograr un mejor posicionamiento de ellos en la sociedad."
Palabras que resultan más que apropiadas en la actual coyuntura ocasionada por el COVID-19, más si pensamos en los modelos educativos virtuales impuestos por la pandemia o la alternancia que se ha propuesto para la educación formal en Colombia.
El artículo citado corresponde con:
Flórez, G., Villalobos, J., Londoño-Vásquez, D. (2017). El acompañamiento familiar en el proceso de formación escolar para la realidad colombiana: de la responsabilidad a la necesidad. Revista Psicoespacios, Vol. 11, N. 18, pp. , Disponible en http://revistas.iue.edu.co/index.php/Psicoespacios
Para el caso de la educación en casas abarrotadas, las soluciones parecen ser muy lógicas, pero difíciles : como salir una sola persona a la calle por razones esenciales, que cada uno guarde un distanciamiento físico, que se diviertan lavándose las manos e higiene, compartir las tareas diarias en forma equitativa, hacer actividad física diaria, y que cuando se sientan cansados y estresados se realice una pausa. Por cierto si son hogares con alto hacinamiento y por lo tanto poco espacio común para compartir.
Abiertamente se ven cuatro miradas diferentes en este proceso difícil que estamos atravesando: (1). Una mirada estatal totalmente desenfocada, alejada de la realidad de las instituciones y de la comunidad educativa, presionada por los grandes contratistas que ven limitadas sus ganancias con el retraso del regreso a las aulas... (2). Una mirada familiar desde las circunstancias individuales en las cuales muchos se tienen que aventurar para buscar el diario y la subsistencia, otros padecen la desintegración familiar que se acentúa por la difícil situación económica, otros viven pendientes del asistencialismo estatal y a través de subsidios plagados de corrupción sobreviven en la miseria... (3). Una mirada de los estudiantes donde muchos no tienen el más mínimo interés de abordar su propio proceso formativo de forma responsable y es que la tecnología se usa para otros menesteres menos para lo importante, adquirir conocimientos y avanzar en sus procesos formativos... (4). Una mirada de los docentes donde son ellos quienes se echaron al hombro la responsabilidad de los procesos educativos, pusieron al servicio de sus estudiantes todos sus medios tecnológicos personales y se aventuraron en el manejo de plataformas digitales y diferentes herramientas para sacar avante el año escolar 2020 y dar inicio al 2021.
Los padres tuvieron que abordar el "rol responsable" en el proceso formativo de sus hijos, abiertamente se escuchan sus voces que manifiestan entender ahora sí la importancia del rol del docente, y es que en muchos casos tuvieron que echar mano de sus vagos recuerdos de estudiantes para poder acompañar a los hijos en sus actividades académicas.
es entonces el COVID-19 un desafortunado pretexto que hizo a las familias volver a ser partícipes activos en el proceso formativo de sus hijos.
La presentación de las fichas presentadas en el foro de hoy dice: "Esta guía ofrece a familias y cuidadores un conjunto de consejos útiles para ayudar a manejar esta situación en las que las familias pueden verse sobrepasadas por distintos factores relacionados con la educación de sus hijos.
UNICEF se ha unido a la iniciativa Parenting for Lifelong Health, formada por varias organizaciones especializadas en el cuidado de la infancia, para poder ofrecer esta guía."
Alguien podría pensar que hay que ser positivo; que al menos la UNICEF se preocupa por ayudar a las familias en tiempos tan difíciles. Más allá de esta discusión, en la cual habrá opiniones a favor y en contra, lo que me interesa es focalizar desde una perspectiva global y educativa, lo que considero es una importante carencia si de hacer una serie de fichas que busquen ayudar a las familias a encarar la difícil situación que nos ha tocada vivir, y que tanto ha golpeado al proceso de enseñanza y aprendizaje, muy especialmente en cuanto al segmento de niños, niñas y adolescentes.
Me refiero a que un aspecto clave, me parece, para que las familias encaren de mejor manera la crisis actual es la de ayudarlas a preguntare, a entender, cómo fue posible que la humanidad, en tiempos de tan grandes desarrollos científicos y tecnológicos, cayera en tan tremendo desastre. No se trata de entrar acá en aportar elementos para responder a esta cuestión. Se trata de marcar que tal pregunta debería constituir un "ficha" clave dentro de las propuestas a las familias como guía. Y encarar esta pregunta no sólo es útil y posible para adultos, también lo es para niños, niñas y adolescentes.
Me parece que factor clave para propiciar la resiliencia y, con ella, la posibilidad de mejorar el procesos educativo en medio de esta crisis, es el de entender de manera seria, razonada y crítica, por qué hemos caído en tan profundo hueco. Y lo es porque, entre otras cosas, ayudará a pensar en caminos que permitan evitar a futuro desastres como el actual. Creo que es un error obviar la necesidad de cuestionarse sobre el tema, y pasar sin más a "medidas prácticas y útiles".
La realidad de nuestro país en la pandemia se a visto que la economía es el un mayor porcentaje informal, que la comunidad no estamos preparados para afrontar el estrés provocado por los motivos expresados.
En el gobierno se ve la necesidad de acciones solo pertinentes a mantener y mejorar la posición de los grandes empolios, maquillando las realidades presentes.
Es encantador ver como grupos sociales buscan dar aliento y mejorar la calidad de vida en los hogares, ésto es algo de admirar.
Las diferentes láminas son muy prácticas, concretas, traen una serie de actividades que buscan solucionar la diversidad de aspectos que pueden estar generando inconformidades o malestares en la cotidianidad que nos ha involucrado la pandemia.
Hay un romanticismo propio de aquel que observa como buen investigador, que está sucediendo haya afuera.
He visto psicólogos desesperados, tratando de resolver problemas de comportamiento en sus hijos en vano.
A lo que quiero llegar, es que la situación es indescifrable dependiendo del contexto y lo más preocupante es que el contexto de las familias vulnerables económicamente son las más difíciles de sortear, le juegan todos los días al hambre, a los bolsillos vacíos, a esquivar virus, a intentar demostraciones de amor a sus familiares en instantes propicios para enloquecer.
El estado debe poner mayor atención en este grupo social, haciendo que en primera medida la canasta familiar sea saciable y en segunda medida que los compromisos económicos que se generan de manera continua como lo son los servicios de agua, luz, gas y ahora conectividad, sean asumidos por el mismo estado. Después de generar esta tranquilidad, se podrán observar los carteles y llevar a cabo tantas estrategias.
Hablando de forma general, muchas familias, entregadas al trabajo, con el fin de poder adquirir beneficios monetarios, para poder subsistir en una sociedad tan injusta y competitiva, han dejado atrás el poder compartir un tiempo de calidad con sus hijos y demás familiares, muchas otras familias, no lo comparten por disgustos, u otros conflictos particulares, o lamentablemente porque los niños y jóvenes de hoy en día, están más concentrados en un celular, las redes sociales, y todo lo que tenga que ver con la tecnología (consolas de video juegos, series, películas, entre otros) dejando atrás la importancia de compartir con sus padres, incluso en los pocos instantes que estos tengan para con ellos.
Aunque sabemos lo que acontece con la pandemia, podemos ver que uno de los puntos positivos fue este, poder retomar, generar, o mantener la “Armonía familiar en casa”. Lo cual nos permite reflexionar al pasar de los días, semanas, meses… sobre la importancia de nuestra familia, y que sin importar lo que pueda suceder, nuestro apoyo incondicional, es nuestra familia.