La situación creada por la pandemia en el sector educativo, a planteado la necesidad urgente de realizar cambios en los paradigmas de los métodos como se presenta este servicio.
Qué podemos resaltar del artículo?, Qué opinión le da?
Podemos resaltar como aporte?
Con respecto al artículo no se debe destacar nada... es una verdad cantada desde finales del siglo pasado y comienzo del presente. Y es un tema que venimos discutiendo desde hace varios meses... El docente debe capacitarse en el uso de herramientas que permita que el estudiante se encuentre activamente y continuamente interesado, y al nivel de las comunicaciones que ellos disfrutan diariamente.
Lo que se hubiera hecho durante la pasada presencialidad, era conocerlas a fondo e interactuar hacia el bien educativo. Ni modo en la pandemia se nos vimos obligados a conocerlas, pero ya estaban abiertas desde años atrás, en forma de capacitaciones financiadas por la SED, o por otros organismos o directamente en la Internet (al docente interesado).
Pero ni modo hay un cumulo de excusas justificadas o no, con respecto al uso de estas tecnologías, que nos quedamos en el mismo estado de "bienestar", que tanto nos fascina.
En el artículo se publican unas cifras de falta de quipos y conectividad en los estudiantes, pero, cabe la reflexión, la gran mayoría de los estudiantes en las ciudades manejan las redes sociales, para ello se requiere conectividad y equipos, entonces por qué a la hora de usarlos para su educación virtual ese cubrimiento y acceso se reduce tanto?... será un tema de voluntad? o tal ves el desarrollo de la cultura del asistencialismo y el facilismo?... la educación virtual requiere una serie de criterios personales de autonomía y desarrollo de habilidades de autoaprendizaje que no se han desarrollado en los estudiantes pues nadie preveía una situación así, nuestros estudiantes no están preparados para ello y las familias no están en capacidad de generar el correspondiente acompañamiento. Se han buscado entonces muchas otras alternativas para hacer posible la continuidad del proceso educativo y han sido los docentes quienes se echaron al hombro este proceso poniendo incluso sus recursos tecnológicos personales al servicio de los estudiantes.
Es normal que haya un número de docentes antiguos que no nos apasione tanto el dominio total de las herramientas tecnológicas en razón a que fuimos formados en otro contexto y que en medio de la pandemia debimos asumir de manera apresurada la actualización tecnológica por cuenta e iniciativa propia, actualización ligada al nivel de interés; entonces, son los docentes jóvenes que van ingresando a la carrera docente a quienes les corresponde liderar el cambio de paradigma y son ellos quienes lideran por formación y por gusto de manera natural los procesos de innovación tecnológica en las aulas.
En este sentido, el reto será buscar las alternativas para superar al máximo las debilidades encontradas en el contexto de la pandemia, entre otras:
Tener mayor inversión del estado en herramientas tecnológicas y conectividad.
Tener mayor compromiso de los estudiantes y sus familias en el proceso educativo.
Generar espacios de actualización docente en lo relacionado con el manejo de herramientas tecnológicas.
La situación requiere de un conjunto de voluntades, un estado que proporcione todos los recursos tanto a los docentes como a los estudiantes tanto dentro como fuera de la institución, la mejora en la condición social del cuerpo de profesores, y de parte de nosotros, la disposición para entregar todo como compensación de un esfuerzo por dignificar la profesión.
Como equipo, insisto, debemos primero dignificar la profesión, siempre nos han hecho ver que todo lo demás importa más por encima de nosotros.
El primer paradigma que se debe romper en cuanto a la prestación del servicio de la educación en Colombia es pensar que todas las escuelas y los escolares son iguales.
Aunque se ha reconocido que existe diversidad cultural en nuestro país, es muy poco lo que se ha podido hacer al respecto, o mejor, lo que se ha hecho resulta insuficiente. Basta ver las demandas que hacen los actores educativos de las regiones apartadas de nuestra nación para darnos cuenta que la escuela no estaba lista en época pre-pandemia, pues sorpresa! aún no está lista en época de pandemia.
En su ensayo y texto que motiva el foro de hoy. La profesora Luz Karime Abadía Alvarado. Concluye:
“Por tanto, más allá de sortear los retos educativos actuales que impone el Covid-19, tenemos en Colombia una oportunidad latente de diseñar políticas públicas efec- tivas que transformen las prácticas educativas involucrando tecnologías digitales. Para ello, es indispensable masificar la conectividad, dotar a los colegios públicos de herramientas tecnológicas y capacitar a los maestros en el uso de éstas y en pedagogías innovadoras que respondan a los retos actuales del sistema educativo.”
Sobre el mismo tema se pronunció el profesor Julián de Zubiría en entrevista que W Radio reseña asía en uno de sus apartes:
¿Cómo potenciar la educación virtual?
“Llegó y se va a quedar”. Sin embargo, para que funcione, es importante formar a los docentes para la virtualidad. Dice que “no es posible dar la misma clase presencial ya que debe ser estratégica al usar las herramientas tecnológicas”.
El inconveniente es que al no prepararse Colombia, el recurso se desaprovecha. Tanto así, que en el 2019, el 63 por ciento de los bachilleres afirmaron no tener acceso a un computador.
(Ver: https://www.wradio.com.co/noticias/actualidad/estos-consejos-le-ayudaran-para-la-ensenanza-virtual-de-los-ninos-y-jovenes-en-cuarentena/20200406/nota/4028887.aspx)
Por su parte la economista Cecilia López, en el diario Portafolio, escribe una nota titulada “¿Volver a la escuela?”, donde indica:
"Cuando se pone en la balanza lo que ha hecho el sector salud versus el sector educativo, tanto en el mundo como en Colombia, se nota la gran diferencia sobre cómo se entiende y maneja una crisis. El sector salud puso los recursos para hacer investigaciones entre universidades y centros de investigación, protocolos para atención del paciente, formación del personal, adecuación de hospitales, reportes en tiempo real y el desarrollo de una vacuna en tiempo récord. En contraste, el sector educativo está apenas sobreaguando y es hora de tomar medidas audaces, las siguientes buscan contribuir al debate."
(ver: https://www.portafolio.co/opinion/cecilia-lopez-montano/regreso-a-clases-en-colombia-volver-a-la-escuela-accion-no-polarizacion-analisis-549162)
Está muy claro, y coinciden en ellos los tres autores, que se requiere con urgencia un viraje de calidad en la importancia asignada por el Estado y la sociedad al sector educativo, incluido lo de la cualificación de los docentes, para mejorar de manera significativa la educación, en especial la pública, en nuestro país. ¿Cómo hacer pasar este consenso, del texto escrito a la práctica real?
¿Qué podemos resaltar?
El artículo nos está mostrando lo que sabemos no solamente con la pandemia, sino desde mucho tiempo atrás, y es algo que se le ha criticado al gobierno desde hace varias décadas atrás, es necesario invertir más en educación y menos en las fuerzas armadas, adicionalmente, con el nivel de corrupción que se maneja en el país, con la desigualdad social, en donde todo sube en alto porcentaje de precio, y el salario mínimo no lo hace, no permite la posibilidad a las personas de estratos 1, 2 y 3 muchas veces acceder a la compra de tecnología para la educación de sus hijos. de estas estadísticas no parte la solución, la solución parte del gobierno, cambiando los intereses generales y dejar de pensar en mantener a los ricos siempre ricos.
Por otro lado, resalto lo que dice al final del artículo, "es indispensable masificar la conectividad, dotar a los colegios públicos de herramientas tecnológicas y capacitar a los maestros en el uso de éstas y en pedagogías innovadoras que respondan a los retos actuales del sistema educativo." pero insisto, para poder lograr esto, el gobierno debe invertir más en educación y abrir más posibilidades a los docentes, en este caso del distrito para seguir preparándose, generando convenios en maestrías y doctorados con todo tipo de universidades y no solamente las de elite o más alto costo en el país. debido a que sin importar el supuesto convenio los costos son muy elevados para muchos docentes que tienen altos gastos en sus hogares.
Cambiar este panorama en Colombia es posible, dejando la corrupción, invirtiendo más en educación, ¿equilibrando el alza en la canasta familiar acorde al alza del salario mínimo... se vale soñar cierto?
Qué podemos resaltar?
Definitivamente se está afirmando lo que todos sabemos, la precariedad en herramientas digitales, la inconectividad y acceso a internet, pero lo que quizás más llama mi atención es el "analfabetismo digital". Y es que me intriga saber cuántos de los últimos están dispuestos a la alfabetización digital, pero no sólo porque lo requieran para sus clases sino sencillamente por estar a la par con las TIC al servicio de la educación.
En este orden de ideas opino que a muchos docentes les desagrada la idea de desaprender y aprender, claro que menos aún bajo la presión social. Capacitarnos debería ser una necesidad personal, motivada por nuestra vocación y menos por la necesidad.