Al preguntar a los estudiantes cuál es la razón que los motiva asistir a la escuela, la respuesta ronda alrededor de: los compañeros o amigos de colegio.
Si la jornada estudiantil está centrada en el conocimiento, cuál es la razón existente para que los estudiantes no enfoquen su pasión a la construcción del saber en las diferentes disciplinas?

Según María José Roldán, escritora para etapainfantil.com, “existe un amplio consenso y evidencia con investigaciones que demuestran que las habilidades sociales y emocionales pueden mejorar el aprendizaje académico y aumentar la motivación de los alumnos para cooperar y lograr mejores resultados tanto de forma individual como en grupo” (2018). En efecto, basta una búsqueda en la red para hallar tan variados temas asociados a las ventajas de la socialización y la escuela.
https://www.etapainfantil.com/importancia-aprendizaje-social-emocional-escuelas
En esta era de desinformación y de vivir la vida de una forma fácil, los estudiantes no encuentran importancia en estudiar porque de alguna manera a través de un supuesto trabajo independiente obtendrán los ingresos para vivir o sobrevivir. Los medios de comunicación motivan este sentir al exponer múltiples empleos que ofrecen una estabilidad lucrativa y rápida, y los compañeros con los que comparten diariamente refuerzan ese sentir. Posible solución es visualizarles las consecuencias que tiene este modo de vida y reforzar sus valores básicos, entre ellos la satisfacción ante sus logros y el esfuerzo conveniente para alcanzar el éxito.
La escuela es un conjunto de ambas, no se debe separar, se prestan los espacios para un aprendizaje adecuado, con el fin de adquirir los conocimientos básicos mediante los cuales se puedan desenvolver en una sociedad altamente competitiva, y, a su vez, es uno de los espacios mas adecuados para que los jóvenes se conviertan en seres sociales, a través de las diferentes experiencias que puedan ir enfrentando. Es por esto, que no se debe restarle importancia a la enseñanza de los valores, y entregarle mejores espacios a materias fundamentales que pueden aportar enormemente en la formación social del estudiante, como lo es Ética y Valores Humanos.
La escuela nace como un espacio que educa a la sociedad para servir, servir al otro, servir al que tienen poder y en algún caso al que lo necesita.
Después logra la interacción con la tutoría personal que solo se da en las élites. Sin embargo, lo enseñado corresponde a los oficios, a leer y escribir, elementos importantes para poder desempeñar funciones que otros en la industria necesitan. La iglesia mantiene la academia porque hace parte del poder.
En la actualidad la escuela debería centrar más su labor en la academia augurando que el conocimiento trae progreso personal y colectivo.
La escuela cada vez utiliza su espacio para abnegar conocimiento y sembrar educación...Será justo?
El doctor en filosofía y catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid, en su artículo "La escuela para el siglo XXI" (http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-109X2013000100004), plantea:
"La escuela debería ser un lugar privilegiado para proporcionar una formación que permita participar plenamente en la vida ciudadana y democrática, pero podemos percibir hoy que existe una contradicción entre el tipo de educación que se proporciona en las escuelas, y el modelo de sociedad al que formalmente se aspira. Lo que tendríamos que conseguir es constituir escuelas que sean democráticas y que preparen a los individuos para actuar como auténticos ciudadanos, y no como súbditos."
Tiendo a coincidir con lo expuesto por el profesor, pero agregaría que si se hace realmente bien la tarea educativa, uno de los resultados formativos sería que el educando aprende a valorar y degustar la importancia del conocimiento científico: no porque se pretenda que "trague" gran cantidad de información académica, sino porque aprenda a valorar la ciencia como la gran herramienta al servicio de la construcción de una mejor sociedad. Entiendo esto como un gran valor formativo, más que como una adquisición de conocimientos académicos. En este sentido no riñe lo formativo como persona, con el conocimiento académico; se complementan.
Yo pienso que desde hace mucho tiempo la escuela es un foco de distracción social más que de cuna del aprendizaje y conocimiento. Los niños en la casa deben cumplir con ciertos deberes y reglas, ayudar en los quehceres domésticos, colaborar a los hermans menores en sus treas, en fin, un sinnúmero de actividades que diatan de las actividades en el colegio. Para qué tanto estudio y tareas si tal como mencionó Nalson "Todo está en internet". Creo que al factor social lo acompaña en poca insidencia el factor académico.
Una de las funciones principales de la escuela es volver a los estudiantes seres sociales, crear competencias cívicas,
Ellos valoran más eso que cualquier asignatura, y más en esta época cualquier información se puede encontrar en la red.
Por eso la labor docente se debe basar en los valores más que en su disciplina, o mejor en valores con excusa su